Deleitese

La esbelta figura de Gisele Bündchen es producto de una estricta dieta a base verduras y cereales en la que la cafeína, el azúcar refinada, los lácteos y las harinas procesadas no aparecen ni por casualidad. Y aunque en los desfiles tiende a romper la regla consumiendo pizza y donas, la top invierte para mantener su figura de oro.

Así lo contó al diario Boston Globle el chef privado de la modelo, Allen Campbell, quien señaló que todos los alimentos que ella y su esposo, el mariscal de campo de los New England Patriots Tom Brady, consumen son orgánicos. "El 80 por ciento de lo que comen son verduras y cereales integrales, como arroz, quinua y judías. El otro 20 por ciento son carnes magras: bistec de reses alimentadas con hierba, pato de vez en cuando y pollo”, explicó Campbell. “En cuanto a pescados, sobre todo cocino salmón”.

Además, según contó, Brady no come plantas solanáceas como tomates, pimientos, setas o berenjenas porque “no son antiinflamatorias”.

 “Uso tomates de vez en cuando, pero puede ser que una vez al mes", reveló.

De acuerdo con el chef, no cocina con aceite de oliva, solo con aceite de coco, y solo usa sal rosa del Himalaya. Asimismo, califica al azúcar de “la muerte”, aunque el jugador de fútbol americano suele permitirse del vez en cuando el lujo dulce de comer una de las galletas de su abuela.

"Mi abuela siempre ha tenido una receta de galletas que nos solía hacer, así que en cada época de vacaciones, Día de Acción de Gracias, Pascua, Navidad, nos las cocina. Se ha convertido en una tradición en casa", comentó Brady en una ocasión a la revista People.

Benjamin y Viviane, hijos de la pareja, también siguen este plan alimenticio, pese a tener 5 y 3 años de edad, respectivamente.De acuerdo al chef, el 90 por ciento del tiempo los pequeños comen igual que sus padres, aunque su merienda es granola, galletas de chocolate y rollos de fruta deshidratados. El almuerzo de Benjamin para la escuela lo prepara siempre su mamá.