
Bebidas con sabor latino que debes conocer
Una cultura muy amable y, sobre todo, fiestera. Los latinos se caracterizan por su típico calor humano para con todos. Desde lo más arriba del norte hasta el fondo del Cono Sur, siempre te saludarán con buen ánimo. Allí coexisten culturas varias y eso se manifiesta de distintas maneras, entre estas, en sus comidas y bebidas.
En cuanto a las bebidas, no hay limitaciones, según el portal Cocina y Vino hay desde dulces y suaves hasta las que son solo para valientes. La diversidad es sumamente amplia en cada trago.
Bebidas con sello latinoamericano
Viche
Propio de las costas del Pacífico colombiano, se elabora de forma artesanal, destilando la caña de azúcar aún sin madurar. Dependiendo de quien la preparare, se le añaden otros ingredientes para darle sabores distintivos. Es conocida por sus presuntos atributos afrodisíacos y su graduación alcohólica es de 35º.
Históricamente, la mujer ha estado muy relacionada con su producción, y a quienes se dedican a este oficio se les llama “sacadoras”. También se le ha dado usos medicinales, como curador de dolores estomacales y control de parásitos en el cuerpo.
Chicha
Es de los brebajes famosos en América Central y del Sur, con gran variedad y formas de hacer, según la región. Se obtiene de la fermentación del maíz o de cereales, como el arroz, o de frutas, como la piña. En algunos países suele tener cierto grado de alcohol, pero en Venezuela y Perú se bebe dulce y suave.
Canelazo
La bebida salvadora en los tiempos del frío implacable. Es muy popular en Ecuador, aunque también se disfruta en Argentina, Bolivia y Colombia.
Generalmente, lleva aguardiente, azúcar o papelón y agua de canela, y se sirve caliente para bajar la temperatura corporal. Se vende en grandes cantidades durante la Navidad ecuatoriana o en las fiestas de la ciudad de Quito. Sus orígenes son desconocidos, pero se sabe que se produce en los Andes desde hace muchos años.
Pisco
Se trata de un aguardiente obtenido por la destilación de la uva, muy similar al brandy y al coñac, pero con la diferencia de que no se añeja en barricas de madera.
El pisco ha generado polémicas desde su nacimiento, ya que tanto en Perú como en Chile se produce, y ambos se disputan su creación. En las tierras incas alegan que es una denominación de origen propia, mientras que los chilenos dicen que también tienen derecho a elaborarlo. Sin embargo, en Perú se hace con el mosto fresco de la uva, y en Chile, destilando el vino.
Mojito
El sabor propio del Caribe es el mojito, esencia del espíritu cubano. Se prepara con ron, azúcar, limón, menta o yerbabuena y agua mineralizada. En las últimas décadas ha alcanzado gran fama en todo el mundo y es común verlo pasearse por las barras de cualquier país. Su historia es tan antigua que se remonta al siglo XVI.
Mamajuana
Este licor es milagroso para los dominicanos, quienes afirman que posee propiedades curativas. Incluso, dicen que puede curar la disfunción eréctil.
Se hace con aguardiente o ron, miel, hierbas, canela, mariscos, corteza de árbol y pasas. Sin embargo, no existen límites en su elaboración y pueden ser añadidos otros insumos.
Tequila y mezcal
Sabor fuerte, cortesía de los mexicanos. Ambas bebidas son extraídas de la destilación de la planta de agave. No obstante, el tequila solo se obtiene de la variedad azul del vegetal, mientras que el mezcal se hace con cualquiera y con un procedimiento más artesanal. Su graduación alcohólica puede ir de 37º a 45º.
Cachaça
Es otra de las versiones del aguardiente, con el toque carnavalesco de Brasil. Es un destilado obtenido del jugo de la caña de azúcar fermentado, muy popular por ser el ingrediente principal del coctel caipirinha. Algunos lo consideran un ron artesanal, que puede llegar hasta una graduación alcohólica de 51º.
La lista pudiese alargarse, pues cada rincón posee su elixir. Los latinos se regocijan con sus bebidas, llenas de historia, dulzor y sabores fuertes para brindar.
*Fotografías tomadas del portal Cocina y Vino*