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Comida olímpica excedente alimenta a indigentes de Río
Una brigada de cocineros solidarios que participan en RefettoRio Gastromotiva le están llevando sonrisas a los indigentes de Río de Janeiro. La propuesta de cocina comunitaria creada por Food for Soul, organización no lucrativa fundada por el chef Massimo Bottura, en alianza con Gastromotiva, asociación establecida por el chef David Hertz, funcionará durante todas las Olimpiadas 2016.
Alentar a las comunidades en la lucha contra el despilfarro de alimentos y fomentar la inclusión social a través del poder transformador de la gastronomía son las razones que unen a 50 chefs internacionales, para ofrecer platos gustosos y dignos a personas de bajos recursos de la localidad de Lapa, en la ciudad brasileña.
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Los chefs Andoni Luis Aduriz, Andrea Berton, Alberto García, Mauro Colagreco, Alain Ducasse, Rodolfo Guzmán, la colombiana Leonor Espinosa, Francis Mallmann, Virgilio Martínez, Pía León, Davide Oldani, Elena Reygadas, Joan Roca, Kamilla Seidler, Mitsuharu Tsumura, Alex Atala, entre otros, se turnarán cada día a fin de elaborar un menú para 108 comensales, con los excedentes alimentarios de las empresas de catering encargadas de las comidas en la Villa Olímpica.
Voluntades para hacer el bien
El RefettoRio Gastronomotiva conjugó aportes y esfuerzos de personas e instituciones de diversos sectores quienes no dudaron en apoyar esta iniciativa marcada por la sensibilidad social. La sede del RefettoRio, ubicada en Rua de Lapa, fue construida en un local cedido por la municipalidad de Río de Janeiro.
Remodelado hace dos meses, este comedor para personas de bajos recursos cuenta con obras de arte donadas por creadores brasileros: Una recreación con chocolate de ‘La última cena’ realizada por Vik Muniz, quien también fungió como curador, y una pieza en gran formato del artista Pas Schaefer. Los muebles fueron diseñados por los célebres hermanos Campana, y la iluminación estuvo a cargo del afamado Maneco Quinderé.
"Esto es un proyecto cultural, no una obra de caridad", sostuvo Bottura, dueño de la Osteria Francescana de Módena, Italia, que tiene tres estrellas Michelin. "Queremos devolverle la dignidad a la gente".
Bottura dice que se inspiró en la campaña del papa Francisco a favor de los pobres y que está usando el mismo modelo que empleó el año pasado en un teatro abandonado durante la feria mundial de Milán. Su objetivo es educar a la gente acerca del desperdicio de alimentos y buscar formas de alimentar a las 800 millones de personas que pasan hambre en el mundo.
*Por: Agencias